La libertad guiando al pueblo (Eugène Delacroix, 1830. Museo del Louvre, París)

domingo, 14 de abril de 2013

Por la república


Imaginaos que el rey no hubiese sido nombrado por un dictador. Imaginaos que la historia que nos han contado sobre que el rey trajo la democracia, que la defendió heroicamente contra los golpistas durante el 23-F, etc., fuese todo cierto. Imaginaos que el rey no cazara elefantes, que él y su familia fueran modélicos, que Urdangarín fuese un honrado entrenador de baloncesto, etc. 

Imaginaos que en España hubiese habido cuatro repúblicas (aún serían menos que en Francia), y que todas ellas hubieran sido un desastre. 

Imaginaos todo lo que queráis. Pues aún así, todavía deberíamos continuar reivindicando la REPÚBLICA. ¿Por qué? 

- Porque creemos que la democracia y la transparencia deben llegar a todas las instituciones del Estado, incluida la jefatura.

- Porque pensamos que todos los ciudadanos deben ser verdaderamente iguales ante la ley y que nadie puede ser “irresponsables ante la ley”, como el jefe de estado actual.

- Porque nadie debe poseer ventajas estamentales o privilegios especiales de familia, sino que todos los que accedan a los cargos o instituciones públicas lo deben hacer habiéndose ganado la confianza de sus ciudadanos en unas elecciones libres.

- Porque lo que interesa de verdad de los cargos públicos, incluido el jefe de estado, no es su vida privada, sino su actuación pública, de la cual deben dar cuentas ante los representantes de la ciudadanía elegidos democráticamente.

- Porque creemos que la monarquía, como sistema mediante el cual una familia es portadora de la representación máxima del Estado y una persona ejerce el cargo de jefe del Estado por herencia, es una institución obsoleta y residual, herencia del Antiguo Régimen feudal, anterior a la modernidad, totalmente incompatible con la idea de igualdad de derechos de todas las personas e incluso con la democracia.
 
14 de abril, Día de la República